Parábolas para volar, paranoyas para llorar y soñar.

miércoles, diciembre 15, 2010

Ducados rubio, para el moreno, el rapero.

Entrando en la madrugada, como todas las noche, ducados rubio. Y una lata de Coca Cola, exquisito elixir, para acompañar.

¿quien dice que sea tarde? ¿Quien me dicta? Mi padre, que no haga ruido, y yo tecleando para escribir mis Termópilas, en mi buhardilla.

Perfecto sería, pasar ya no solo a los anales, sino también a los orales de la historia, pero por el momento, todo puede esperar, como dije antes,

¿quién dice que sea tarde?